Huelga decir que yo no tengo un pelo fabuloso. Pero después de muchos años de experiencia y una ardua e intensa investigación sobre el tema he sacado unas cuantas conclusiones que voy a compartir con todas vosotras. Y si son útiles para alguna ya me daré por satisfecha.
Está claro que estos consejos no son para aquellas tocadas por la varita mágica de tener un pelo fabuloso de por sí, sin hacer nada. Pero para aquellas menos privilegiadas allá va: